lunes, 19 de diciembre de 2011

Galletas de Jengibre

Ya casi es Navidad, por si no os habíais dado cuenta. Con ella llega el comercio y el bebercio sin mesura, el reencuentro con la gente querida y sobre todo con aquéllos que vemos poco durante el resto del año.
Yo siempre fui muy anglosajona, todo lo de allí me pirra, ya sabéis, hamburguesas, shortbread, beans, esas gochadas que tanto gustan a los nórdicos. Una de las cosas que más me gustan son las galletas de jengibre. Algunas tengo comprado en el super del IKEA en mis tiempos británicos, y cómo no, siempre quise aprender a hacer ese tipo de galletas.
Todos sabéis de qué galletas hablo, esas con forma de muñequito que salen en todas las películas. (Entrañable personaje de Shrek sin duda).

Ya el año pasado intenté hacerlas, pero me habían salido un churro. Galletas de mantequilla con un poco de especia y na más, pero hoy y con la ayuda de mi primija conseguimos hacerlas! Si! No tienen forma de muñeco, porque no tengo el molde ni me apetecía pasarme media vida cortando muñequitos.

Lo que hice fue adaptar ésta receta: http://www.joyofbaking.com/GingerCookies.html

y seguí este procedimiento:

En un bol mezclé 2 tazas de harina con 1 cucharada de levadura, 1 de canela y 1 de jengibre en polvo.

Por otro lado, derretí 125gr de mantequilla y lo mezclé con media taza de azúcar moreno. En una sartén echamos aprox. un vaso de azúcar, lo calentamos e hicimos caramelo (OJO: atentos al caramelo, hay que ir removiendo el azúcar sin parar, y sin que se queme ni se pegue). Una vez listo mezclé el caramelo con la mantequilla y el azúcar, sin quitarlo del fuego claro, porque el caramelo se solidifica. Cuando ya la mezcla estaba más o menos homogénea la mezclé rápidamente con la harina. Amasamos bien, añadiendo harina si aún veíamos que estaba demasiado líquida. Una vez lista la masa, la tapamos y la dejamos reposar 1 hora en la nevera. 

La masa que quedó después de reposar estaba bastante dura, no muy manejable para extender en la mesa con el rodillo, lo que hice fue hacer pequeñas bolitas y luego las aplasté sobre la bandeja. Luego al horno precalentado y que se cociesen durante unos 10-15 minutos, y.... TACHÁN! Mi primer éxito (compartido con mi primija) con las galletas de jengibre!

jueves, 24 de noviembre de 2011

Champiñones rellenos

¡Es tiempo de setas, señores! Y cómo tal, el otro día compré una bandeja de hermosos champiñones. Eran hermosos y enormes y me inspiraron enormemente, a rellenarlos.

Simplemente, cortar los tallos del champiñón (tantos como te quieras comer) y vaciar un poco la cabecita, para que haya hueco suficiente para meter el relleno. Qué de esta vuelta consistió en cocinar los tallos y lo que sobró de dentro de los champiñones, con un poco de ajo, un trozo de tomate, sal y pimienta en una sartén con un poquito de aceite. Ya listos unos taquitos de jamón y a rellenar!

Antes de echar el relleno, cómo no, unté los champiñones, aún crudos, con queso de untar (semos fanes) y luego si, con la ayuda de una cuchara, meter el relleno en los champis, previamente colocados en una bandeja apta para horno. Que es a dónde se van durante media horita a fuego medio, hasta que estén blanditos y tengan un color marroncito delicioso.

La verdad es que son super fáciles de preparar, y como el relleno se hace con los tallos de los champiñones, tenemos la certeza de que no nos va a sobrar. Creo que la semana que viene volveré a comer champis rellenos! Oh, yeah!

domingo, 13 de noviembre de 2011

Me invento mi propia sopa de ajo

Sigue la lluvia a Galicia! Y con ella, el frío y los catarros. Ahora mismo sufro mi congestión lo mejor que puedo. Para paliar el catarro hice sopa. Como en casa tenemos un montón de ajos quise probar a hacer sopa de ajo. Un plato muy español, pero que en Galicia, o al menos en mi entorno no se come mucho. Busqué en internet la receta, aquí está muy bien explicada, con fotos del proceso y todo: http://www.mercadocalabajio.com/2008/09/platos-para-principiantes-sopa-de-ajo.html Peeero, como esto es un piso de estudiantes faltaban ingredientes, el jamón y el pan; y a mi tampoco es que me haga mucha gracia lo de echarle los huevos a la sopa para que se cuezan, así que como siempre, improvisé y triunfé.

La sopa es sencilla de hacer. Empecé por dorar unos dientes de ajo (yo usé 3 bien grandes y bien trozeados) en aceite, en una cacerola grande. Cuando estaban bien doraditos, aparté la olla del fuego, añadí una cucharada de pimentón dulce (a falta del picante) y tres cucharadas de harina de maíz (a falta de pan).
En otro cazo aparte, diluí dos pastillas de caldo de pollo en un litro de agua (lo que indican las instrucciones, vamos). Esto lo vertí sobre el sofrito de ajo y lo puse a fuego lento, durante unos 20 min. evitando que rompiese a hervir. Mientras estaba la sopa al fuego, añadí un tomate troceado, un chorrito de vino, un poco de pimienta y otro pelín de orégano. Si fuese necesario, hay que echarle sal, de hecho mi sopa la necesitó.

Lo cierto es que me quedó muy aceitosa, pero a pesar de eso está bien de sabor, y supongo que con pan estará riquísima, como sobró un montón mañana podré comprar pan y mojarlo bien mojado. 

jueves, 27 de octubre de 2011

La canción del gazpacho

Hace un par de meses, hice un gazpacho y subí la receta al blog http://cebandoalosamigos.blogspot.com/2011/08/gazpacho-gastronomia-andaluza.html .

Estos días descubrí, gracias a mi primija, a La Ogra que todo lo Logra. No sé muy bien de dónde habrá salido, pero su canción Te borro del feisbuh, es un temazo, que ya tiene chupicientas vistas en youtube. Pero aparte de ese tema, La Ogra tiene una canción dedicada al Gazpacho, que como me hizo tanta gracia, y cómo tiene relación con el blog, pues tuve que subirla. Todo un himno al gazpacho en clave Bollywood, en el que se nos presenta la receta de forma muy sencilla y original.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Arroz con leche

Por fin llegó la lluvia! Y con ella las cosas buenas del frío: taparte con una mantita, leer tranquilamente mientras oyes llover, y cómo no, tomar cosas calentitas!

Hoy es un día especialmente lluvioso, y ni me atrevo a abrir la ventana. Era en días como éstos en los que mi madre hacía arroz con leche. ¡Uno de mis postres favoritos! Pero, mamá no está, así que me tuve que preparar yo mi arroz con leche. Busqué en google recetas de arroz con leche, pero ninguna me convenció: ¿hervir el arroz en agua primero? NAH! A mi me va más lo bruto, y así fue cómo lo hice yo:

Primero puse a calentar 4 vasos de leche con un trozo de corteza de limón y 4 cucharadas de azúcar. Cuando hirvió eché un vaso de arroz (aunque debí haberlo lavado previamente) y bajé el fuego al mínimo. No sé cuanto tiempo dejé el arroz al fuego, pero calculo que una media hora o cuarenta minutos. Siempre comprobando la dureza del arroz. Una vez que el arroz absorbió casi toda la leche la saqué del fuego y lo dejé reposar.

Ya para comerlo, lo espolvoreé con canela molida y me lo zampé, así con muchas ganas. ¿Qué mejor para combatir el frío que un arroz con leche calentito?

jueves, 20 de octubre de 2011

Ensalada templada de pollo

Después de mucho tiempo ya estamos de vuelta con más cosas. Lo cierto es que estos días estuve poco inspirada y me repetía en las comidas que hice. Esta mañana andaba corta de tiempo, pero aún así me dio para preparar esta delicia que os traigo.
Se trata de una ensalada templada, si, si, ensalada templada. Es una ensalada normal, sólo que en vez del aliño típico de aceite y vinagre se usa un aliño caliente. Hace un tiempo probé una en un restaurante de Mieres que tenía un aliño de setas con gambas, que te cagas de rico, vamos. La mía no estaba tan deliciosa, pero oye, que disfrutamos comiéndonosla.

Pues para hacer esta ensalada lavé y corté 1 lechuga y medio tomate, los puse en una ensaladera con unas cuantas aceitunas y un par de huevos cocidos, y lo aparté. Una vez hecho esto hay que preparar el aliño. El que hice hoy es de pollo, primero corté en cubos unas pechugas de pollo, las salpimenté y las freí en un poco de aceite con un diente de ajo. Una vez listo el pollo, bien hecho y crujiente, añadí una cucharadita de mostaza, una lata de maíz en conserva, un poco de queso Philadelphia y lo calenté hasta que se derritió el queso. Ya al final, añadí un poco más de aceite y vinagre, lo dejé en el fuego un rato. Luego, inmediatamente vertí el aliño caliente sobre la ensalada que tenía preparada.
Riquísimo!

(siento el extraño posicionamiento de la foto, no fui capaz de solucionar el problema técnico. Pero es que yo cocino, de ordenadores, se poco...)

jueves, 6 de octubre de 2011

Pollo recubierto de pimiento.

O pimientos rellenos para los que les gusten las denominaciones tradicionales.

Hoy os traigo, entonces, los pimientos rellenos que hice el otro día. Tenemos un montón de pimientos en casa y algo hay que hacer con ellos antes de que se pudran. También tenemos, cortesía de la familia, un montón de pechugas de pollo en la nevera. Así que, echándole imaginación me marqué estos pimienticos.


Lo primero es preparar el relleno: cuatro pechugas de pollo cortadas en cubos (o algo similar) y cubrir de sal y pimienta, bueno, cubrir no, echarle lo suficiente para darle algo de saborcillo. Apartar y preparar el sofrito: en una sartén calentar aceite y dorar un diente de ajo troceadito, media cebolla y medio pimiento de chilli (de los que me dio mi prima el otro día, pequeños pero matones oiga). Cuando está todo doradito se añade el pollo y un tomate, por eso de darle colorcillo. También mola echarle orégano (cómo me gustan las especias!).

Por otro lado, coger los pimientos que vamos a rellenar, cortarles la parte de arriba como si fuese una tapa y vaciarle las pepitas (¿eso se come?). Una vez listos los pimientos les untamos un poco de queso Philadelphia por dentro y rellenamos con el pollo (o de lo que hayamos preparado, como si nos apetece rellenarlos con queso solo). Tapamos los pimientos con la tapa que le cortamos, colocamos en una bandeja engrasada con aceite y 1 hora al horno a fuego medio.

Voilá! Mi primija me declaró todo su amor cuando llegó el otro día de clase y se encontró con estos pimientos rellenos. Qué rico!!!

lunes, 26 de septiembre de 2011

Bombas calóricas. También conocidas como empanadillas.

Hoy me aburría mucho esta mañana, y había en la nevera unas acelgas que había que comérselas ya o ya! Entonces, en un momento de inspiración me decidí a hacer unas empanadillas.

Primero hice la masa de las empanadillas: una taza de harina, un huevo, un sobre de levadura, medio vaso de leche, un chorro de aceite y sal. Esto todo lo amasé bien, bien, añadiendo harina hasta que me quedó una masa que no se me pegaba en las manos y que al tacto era como un chicle bien masticado. Bien amasada por supuesto, pegándola de ostias contra el mármol de la cocina.

Por otra banda, cocí las acelgas con un poco de sal y preparé una bechamel: derritiendo algo así como una cucharada de mantequilla, a la que se le va añadiendo harina hasta que quede una masa uniforme. Luego le añadí leche para que se fuera diluyendo esta masa, sin parar de remover. Al final tiene que quedar una salsa espesa, sin grumos a la que le añadimos un poco de sal y pimienta. O nuez moscada, dependiendo de lo que te guste más.

Una vez cocidas las acelgas, las escurrí, las corté y las mezclé con la bechamel. También le añadí unos trocitos de jamón serrano, por eso de dar sabor y esas cosas.

Finalmente, estiré bien la masa, hice círculos con la masa poniendo una cuchcarada de las mezcla en el centro y cerrándolas bien. Voilá! Empanadillas, finalmente las freí en aceite bien caliente y ahí están estas bombas de harina y mantecas!! :D

jueves, 22 de septiembre de 2011

Udon improvisado

Lambones!! Aquí estamos de vuelta con más recetas. Lo cierto, es que ahora que ya no vivo en casa papi-mami es un placer, porque todo me lo tengo que cocinar yo, así puedo improvisar muchísimo, no sólo con postres, si no también con platos principales.
Hoy os traigo mi versión personal de los udon, unos fideos japoneses muy gordos, y deliciosos. Una amiga japonesa me enseñó a hacerlos a la manera japonesa hace unos cuantos años, pero salían un poco insípidos, además, aquí no disponemos de los ingredientes necesarios. Pero, como aún tengo los fideos en casa, pues me decidí a usarlos.

Aquí cómo hice este manjar. En realidad es como una sopa normal, pero con fideos largos y gordos. :D

Primero hice un sofrito con un diente de ajo, una cebolla y medio pimiento. Luego le añadí champiñones, y cuando ya estaba más o menos preparado eché pechuga de pollo cortada en cubos. Para darle sabor, en vez de sal usé salsa de soja (para darle el toque oriental). Una vez cocinados los vegetales y el pollo, añadí tres tazas de agua. Finalmente, metí los fideos para que se cociesen en la sopa, y voilá!

Era más bien una sopa normalilla, sin embargo, al usar salsa de soja tenía un sabor muy diferente al que estamos acostumbrados... La verdad es que la salsa de soja como condimento es muy bueno, verdaderamente sabroso!

Aquí mi versión de los udon:

domingo, 18 de septiembre de 2011

Recetas al instante

Normalmente, todos los días reviso ciertas páginas webs de chorradas. Qué le vamos a hacer, soy mucho de malgastar mi tiempo. Hoy, tras varios días sin verla me revisé todos los nuevos posts de pelandobananas , Mr. Banana puso un post sobre webs útiles. Algunas muy interesantes, algunas ya conocidas, algunas completamente inútiles. 

Peeero, entre ellas encontré toda una mina de inspiración. Acabo de descubrirla, así que todavía no probé nada, pero seguramente que me ayudará en momentos críticos cuando tengamos la nevera bajo mínimos y no nos funcione la imaginación. 

La página se llama Cookle, y por lo que vi es cómo un google de las recetas, introduces los ingredientes en el buscador y te sale un listado de todas las recetas que los contienen. Tengo ganas de probar a hacer alguna de las recetas que me aparezcan. Por el momento os dejo el link! 

jueves, 15 de septiembre de 2011

Roscocho de café con chocolate

Estamos de vuelta con más cosas ricas! Me disculpo por este lapsus tan grande, pero ya estoy de vuelta con nuevas recetas, y más ahora que empieza el curso y preferimos comer a estudiar.

Esta mañana, como me aburría me puse a hacer un bizcocho, todos sabemos ya como hacer un bizcocho, pero este tiene varias alteraciones de la receta original.
Batimos 6 huevos con 1 vaso de azúcar, 125gr de mantequilla derretida, un yogur de vainilla y media taza de café. Seguidamente, un sobre de levadura y 2 tazas de harina. Cómo siempre.

Una vez preparada la mezcla para el bizcocho le añadimos chispas de chocolate, las podéis comprar ya preparadas, o podéis hacerlas vosotros cortando trocitos de una tableta de chocolate. Yo para este roscocho usé chocolate negro de Nestlé, de esa marca que tienen ahora que se llama Dolca, que sinceramente está muy muy bueno.

Cuándo ya está todo mezclado, lo echamos al molde y pal horno, unos 40 min a temperatura media.

Aquí os dejo el resultado.

martes, 23 de agosto de 2011

Galletas metaleras

Navegando por la web me encontré con esto:


Creo que voy a probar a hacer galletas metaleras algún día.

lunes, 22 de agosto de 2011

Marruchos

Cada vez que nombro los marruchos en alguna conversación todo el mundo me mira extrañado. Marrucho es una palabra que se usa sólo en la zona de Galicia en la que vivo.
Todos estáis hartos de comer marruchos, de ello estoy segura, pero vosotros los conocéis por otro nombre. O igual lo que conocéis es el famoso bar de Baiona de mismo nombre. Pero cuando acabéis de leer la receta, seguro que adivináis de que plato se trata.

Para hacer una cantidad de Marruchos(unos 10 puede ser), necesitamos 1/2 Litro de leche, 4 huevos, unos 200 gramos de harina, medio vaso de azúcar, unos 100 gr de mantequilla, derretida por supuesto,(yo los hago con mantequilla, tradicionalmente se hace con manteca de cerdo, también se puede hacer con aceite de oliva), ralladura de limón y un poco de canela. Hay que mezclarlo todo muy bien para evitar que se formen grumos.

Una vez lista la mezcla se pone una sartén al fuego, procurad que sea antiadherente y esas cosas, se unta con un poco de mantequilla/aceite/manteca y empieza la fiesta. Con un cucharón vamos haciendo los marruchos, se echa un poco de mezcla y se extiende por la sartén. Una vez que estén hechos por un lado hay que darle la vuelta. Esto es lo más difícil. Desgraciadamente hacía mucho tiempo que no preparaba unos marruchos, y hoy sólo me salieron bien 3. Acabé usando la técnica de darles la vuelta en el aire.

Otras técnicas pueden ser: agarrar el marrucho por el extremo con los dedos y darle la vuelta, a riesgo de quemártelos; darle la vuelta en el aire como un profesional, o que se te arruguen todos, o valerte de espátulas tenedores y otros utensilios. Pero la mejor técnica es practicar hasta que salgan bien.


Aquí os dejo los resultados de hoy, incontables marruchos destrozados





y tres decentes:


¿Sabéis qué otros nombres recibe este plato típicamente gallego?

lunes, 1 de agosto de 2011

Gazpacho. Gastronomía andaluza

Tengo que confesar que nunca he estado en Andalucía. Soy muy apegada al Norte de la Península, el clima mediterráneo y el calor no me gustan nada. Aunque algún día iré al Sur, que espero que sea pronto, aún tengo pendientes unas visitillas a mis amigos andaluces, pero de momento, lo único que puedo hacer es importar sus cosas a Galicia.

Cómo es tiempo de tomates, y en casa nos salen por las orejas, me decidí a probar a prepararme un gazpacho en casa. Hasta hoy, mi único encuentro con esta bebida típica del sur había sido en su forma procesada y embotellada, una trapallada vamos. Cómo estamos en verano y nuestra huerta está a rebosar de hortalizas me puse manos a la obra para preparar este plato tan fresquito (aunque ahora se nos está volviendo a nublar el tiempo por aquí.)

Hacer un gazpacho es una chorrada, y en 10 minutos tienes una jarra de litro y medio bien llena. Para mi gazpacho usé 5 tomates bien grandes, 2 pimientos verdes y 1 pimiento rojo, medio pepino, una cebolla y un diente de ajo. Lo trituré todo bien triturado con la batidora eléctrica y le eché un poco de sal, 3 cucharadas de vinagre y 6 de aceite de oliva.


Pero como soy una bruta me pasé con la sal, estaba intragable! Así que lo rebajé con un poquito de agua.
En muchas recetas que vi se le añadía pan reseso remojado en agua para espesarlo, sin embargo, yo me ceñí a los vegetales nada más. Está bueno, siguiendo mi ideario de que "cualquier cosa que lleve tomate tiene que estar buena". Hoy a la hora de comer me bebí bien un cuarto de la jarra que preparé. Sin embargo, debe ser cosa del ajo, se me va repitiendo mucho. Pero aún así, el gazpacho en un día caluroso debe ser mano de santo. Y yo, durante estos dos días, me parece que acabaré aborreciendo mi gazpacho salado, por que en mi casa no son muy fans de este plato tan diferente a lo que acostumbramos en el Norte.
N.B.: Para mejora y disfrute del gazpacho le añadí orégano y un poco de pimienta, mucho más tragable, dónde va a comparar.

domingo, 31 de julio de 2011

La Zorza. Gastronomía Gallega

Golosos míos! Hoy dejamos de lado los dulces para hablar de un plato de salado. (Lo cierto, es que aunque yo disfruto haciendo dulces me gusta más el salado).

El plato en cuestión es la zorza. ¿Qué es la zorza? Preguntaréis aquellos que no habéis descubierto todavía las maravillas de la gastronomía gallega, que va más allá de la Tarta de Santiago y el marisco.

La zorza, amigos, es el preparado de la carne para chorizos. La base: carne de cerdo troceada y adobo: pimentón, ajo, orégano, sal y aceite de oliva. Esta mezcla se preparaba el día de la matanza del cerdo, una práctica aún común en Galicia, aunque cada vez menos (yo aún recuerdo las matanzas en mi casa, pero ya hace muchos años que no tenemos cerdo). Se dejaba la carne reposar en el adobo para ser embutido en tripas de cerdo unos días más tarde, pero antes de hacer los chorizos se probaba, ¿cómo? Pues se freía una poca para comprobar si la carne ya estaba en el punto para hacer unos deliciosos chorizos.

Este plato es uno de mis favoritos, si bien, en mi casa nunca la comemos, pero cuando me voy de tapas es obligado pedir una ración. En cualquier restaurante gallego que se precie la ofrecen, a veces sola, a veces acompañada de unas patatas fritas. También es común encontrar empanadas de zorza, o en bocadillo. Un plato muy versátil. Sin embargo, a mi, lo que más me gusta es mojar pan en la salsa.

sábado, 30 de julio de 2011

McFlurry Casero

Aunque a muchos nos cause un gran dilema ético el ir a un McDonalds, a todos nos gusta, o no? De todos los productos que se ofrecen en esos infernales restaurantes de obesidad, uno de los mejores es el McFlurry.

¿Cuantos no sucumbimos a meternos en un McDonalds cuando pasamos por delante para comernos uno, sea con Oreo, con KitKat, con M&Ms o con lo que tengan?

Pues hoy, golosos míos, os descubro la receta secreta de semejante manjar. Bueno, en realidad nos lo descubrió una usuaria de la página Tenía Que Decirlo, en la que nos daba la receta. Y yo, ni corta ni perezosa ya probé a hacerlo, y lo cierto es que está más que rico. 

Para hacerlo mezclé unos 400ml de nata con unos 200gr de leche condesada (medio bote de los pequeños) en mi batidora mágica manual y luego para el congelador. Al final, para rematar la bomba calórica, cuando lo saqué hoy de la caja de frío le eché unas Mini Oreo. Una orgía de dulzura, os podéis hacer una idea. Mil veces mejor que el que podríais comprar en cualquier McDonalds!!! (Aunque el mío estaba tan congelado, que doblé dos cucharas al sacarlo del recipiente a un bol). 





viernes, 15 de julio de 2011

La Poketarta Charmander

Hace una semana fue el cumpleaños de un amigo y como es costumbre de unos cumpleaños para acá, me tocó hacer la tarta. Tenía ganas de hacerle algo especial. A mi amigo le gusta mucho Pokémon y su favorito es Charmander, entonces qué mejor regalo que hacerle una tarta con un dibujo de Charmander.

Es un pastel verdaderamente básico. La base de todo es hacer un buen bizcocho . Una vez hecho y frío se corta por la mitad, hacer un pastel es como hacer un sandwich. Éste pastel de Charmander es de 3 pisos, con dos rellenos diferentes: en un espacio mermelada de albaricoque y nata montada, y en otro chocolate.
Sin embargo, lo importante y lo que seguramente queréis saber cómo hice es el dibujo de Charmander. Para ello tuve que practicar antes a dibujar un Charmander en papel, una vez que me salió me atreví  a hacerlo con la manga.
Para conseguir el color naranja del charmander mezclé nata montada con mermelada de albaricoque. Para las líneas negras, obviamente usé chocolate fundido, aplicándolo con una manga pastelera. Ésto fue lo que más me costó, porque el chocolate enseguida se me endureció porque no lo mezclé con nada. Otras veces le añado nata líquida al chocolate al fundirlo y queda una pasta mucho más manejable. De todas formas y a pesar de lo que me costó sacar en chocolate de la manga no me quedó mal del todo. Juzgad vosotros mismos! :D

jueves, 9 de junio de 2011

Mermelada de Albaricoque

Este año fuimos previsores y recogimos los albaricoques todos en un sólo día. Os podéis imaginar el tinglado, cubos y cubos de albaricoques poblando la cocina. Me decidí a hacer mermelada con tanto albaricoque.

Busqué en internet una receta sencillita, de hecho, no hay nada más sencillo de preparar que la mermelada.

Lavé y corté lo que sería más o menos 1 kilo de albaricoques,(a ojo, la verdad, no se cuantos eché, pero llené la tartera hasta arriba con ellos); luego le añadí un vaso de azúcar blanco y el zumo de dos limones.  Una vez todo dispuesto en la cazuela lo puse a fuego fuerte. Poco a poco los albaricoques fueron perdiendo el agua, una vez blandos los trituré con la batidora. Ahora lo que hay es zumo de albaricoque, se pone un fuego medio y ya el resto es dejar hervir y revolver, revolver, revolver para que no se pegue nada a la olla hasta que se vea que esta lo suficientemente espesa.

Luego el resto, si se quiere conservar semejante manjar, se puede envasar al vacío en tarros. Esto también es superfácil. Hay que, simplemente, llenar los tarros, cerrarlos bien y meterlos en una olla con agua, sin llegar a cubrirlos, hervir durante unos minutos y ya está.

Lo cierto, es que, baja modesto, la mermelada me quedó muy rica, el limón conserva perfectamente el sabor de los albaricoques, además de preservar el color naranja característico de esa fruta. Podéis ver una foto del resultado en la entrada Canapés para el té . No puedo esperar a que salgan las ciruelas y probar a hacer mermelada con ellas!

martes, 7 de junio de 2011

Canapés para el té

Buenas, glotones.
Hoy me metí en la cocina, invité a unos amigos a merendar, pero tenía muy poco tiempo. Me saqué de la manga unos canapés para acompañar el té. Algo sencillito y rápido, pero efectivo.

Primero corté dos rebanadas de pan de molde en triángulos y los tosté. Con mucho cuidado los saqué de la tostadora, que casi me quemo los dedos un par de veces, y los recubrí con margarina (Tulipán del de toda la vida, nunca falta en la nevera). Y finalmente las pinté con mermelada. Usé la mermelada de albaricoques que hice la semana pasada, y a la que dedicaré un post pronto.

Es super sencillo de preparar, con cosas que siempre andan rondando por nuestras cocinas y muy rico. El resultado es increíble para algo tan sencillito.

domingo, 5 de junio de 2011

Mi receta para el bizcocho

Muy bien, empezamos con este blog de cosas ricas. Todo aquello que haga disfrutar a un paladar aparecerá en este blog. Pero para poder hacer cosas deliciosas y elaboradas, primero hay que saber hacer las cosas sencillas. Así que empezaré con mi receta personal para el bizcocho. Cada persona es un mundo, y cada uno tendrá su receta propia. Yo, de hecho tengo hecho mil pruebas, sin derretir la mantequilla, batiendo las claras a punto de nieve, y mil cosas más. Pero creo que ya encontré mi receta, que tendrá sus detalles que mejorar, pero que me está dando muy buenos resultados (a mis amigos les encanta).

Lo que hice fue adaptar esta receta: http://www.joyofbaking.com/CreamCheesePoundCake.html . Las medidas están calculadas por ahí, pero obviamente, ahora es mi receta de bizcocho.

Así es como lo hago normalmente: 
- Bato unos 5 o 6 huevos con un vaso de azúcar. Luego le añado 125gr de mantequilla derretida(calculo de una barra de 250gr) y un yogur de vainilla, de la marca gallega Larsa, y media cucharadita de esencia de vainilla. Cuando la mezcla está homogénea, después de mucho batir (No soy fan de usar la batidora, me gusta más el trabajo manual. ) le añado un sobre de levadura Royal y entre 2 vasos de harina. Suelo calcular a ojo, cuánta más harina se eche, más seco será el bizcocho. Y por último un chorrito de algún licor, el Disaronno le queda muy bien, últimamente le echo vino Oporto. Pero cualquier licor dulce le viene bien. Hay que obtener una masa que ofrezca resistencia al mezclarla, pero que no se quede pegada a las varillas. 

Una vez está lista se echa al molde. Si tienes moldes de silicona estás de suerte, porque son una maravilla. Si el molde es metálico hay que engrasarlo bien con mantequilla y enharinarlo, para que no se pegue. Si no se le echa la harina, no sirve de nada. A mi madre siempre se le suelen pegar sus bizcochos porque sólo engrasa el molde y nada más.

Finalmente, el tiempo de cocción. Yo suelo encender el horno en cuanto saco los huevos de la nevera, lo pongo a 150º más o menos. Una vez que tenemos lista la masa el horno ya está perfecto. Pero ésto, como todo, depende del horno que tengamos. El bizcocho debe cocinarse a fuego lento, entre 150º y 180º, y puede llevar de media hora a 50 minutos. En mi horno en 45 min suele estar ya listo. Pero el truco infalible para saber si el bizcocho está hecho es esperar al menos 40 min y a partir de ese tiempo abrir cuidadosamente el horno y ver si el bizcocho ya subió. Si es así se pincha con un cuchillo, palillo, lo que tengas a mano, y si sale limpio el bizcocho ya está. A pesar de todo, hay que estar SIEMPRE atentos al horno.

Un bizcocho es lo más fácil de hacer. También es la base de muchos pasteles. Si no sabes hacer un bizcocho, no puedes hacer una tarta. Pero cualquiera puede hacerlo, tratando al bizcocho con mucho cariño y dándole su tiempo para que quede en su punto. :D